Ganas de nada,
Ganas de ti,
De tus labios,
De embriagarme en tu mirada,
De morir en tu palabras,
De arrojarme por la inexistente verdad
En la pared frontal de mi recámara,
Estrellar mi cara contra el pavimento,
Y así, darle macana a esas ideas
Circundantes en la mente
Que me dicen que te olvide.
Ganas de perderme en la profundidad de tu ser,
Ganas de ser nada sino un respiro tuyo,
Que me renuncie a esta vida por el placer de ser
Todo aquello que he ganado.
Ganas de nada,
Congelado en el toque de tu piel,
De suicidarme esta noche arrojándome a tus labios.
Ganas de perder este cuerpo
Que me traiciona
Al responder al impulso de mirarte otra vez.
No me quedan ganas de verte alguna otra vez,
Sino de congelarte frente a mí,
Para no dejarte de ver nunca,
Ganas de congelar tu imagen y tu voz,
De congelar tu sonrisa,
Esa misma que me ensalsa el alma,
Que me levanta cuando se que estoy muriendo
Por olvidarme de mí.
Me dan ganas de echar esta noche todo a la suerte,
No para olvidarte, sino para saber,
En que momento besarte.
lunes, 11 de agosto de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario