domingo, 2 de noviembre de 2008

TUNDRA

Invierno que no acaba
por cortar este olvido,
quie todos somos uno,
que uno no o es,
y comienza ese primario
por coger esta salida que no mata,
pero cala al describirte
hasta el más mínimo detalle lo que no conoces,
que todo aquello que se observa es
sino lo que será,
y se describe en lo que muere,
en l que nace siendo muerte,
en lo que muere siendo nada.

Que tan solo ya en picada,
se descubre en su mudez,
tan al hazar,
con un viento sibilante,
con un sonido cortante,
con u chirrid constante,
y ese filo recalcitrante
apagado en tu costado,
desgarrando entre la suerte
surtiendo por la noche
con la misma fe
de u rez inmaculado.

Entre auoras rudimentas,
comenzando por reír.

No hay comentarios: